Ciberataques a ayuntamientos, a aeropuertos y al sector industrial, ¿cuál es su impacto económico?

Últimamente, la ciberdelincuencia no le ha dado tregua ni al sector público, ni al privado: todo empezó con Jaguar Land Rover siendo atacada desde el inicio de septiembre y comprometiendo así su capacidad de producción -y, por tanto, de negocio- más de tres semanas después. Posteriormente, el objetivo fue Collins Aerospace, el proveedor de facturación y embarque de distintos aeropuertos por toda Europa -Bruselas, Berlín, Dublín y Londres Heathrow– que días después seguía causando retrasos y que provocó la cancelación de miles de vuelos. Por último, hace apenas unos días un ciberataque afectó al sistema de riego del Ayuntamiento de Valencia e hizo que algunas zonas del antiguo cauce del río Turia se inundaran. Quizá este último ciberincidente es el más anecdótico, sin embargo, se conforma como una primera brecha de seguridad para acceder a sistemas adyacentes y a otros más críticos.

Además de comprometer datos sensibles, así como de sembrar el caos, los ciberdelincuentes han provocado en el último lustro pérdidas de más de 300.000 millones de euros a las cuatro mayores economías de la UE – Francia, Alemania, Italia y España-. Solo en el caso de Jaguar, los datos estimados apuntan a que la firma se vio obligada a frenar en seco una producción diaria que se estimaba en 1.000 vehículos con las pérdidas a nivel económico que eso supone. El hecho de tener que parar la producción afecta, por supuesto, a los trabajadores directos, pero también a todos sus colaboradores: miles de empleos indirectos de diferentes empresas que se encargan de abastecer de piezas y materiales a la propia firma automovilística. Este ataque, sin precedentes, ha supuesto una crisis a nivel nacional en Reino Unido.

Solo en España, según datos de CibersecurityNews, este año los ciberataques han aumentado un 35%, superando los 45.000 diarios y tal como señalan desde el centro de ciberseguridad industrial ZIUR en Guipúzcoa, España es también el tercer país más atacado por hacktivistas pro-rusos. El panorama geopolítico tampoco ayuda: algunos expertos barajan distintas opciones entre las que destaca que es posible que este aumento de los ciberataques en territorio nacional esté relacionado con la decisión de Estados Unidos de suspender sus operaciones cibernéticas ofensivas contra Rusia. De ahí que los grupos criminales de Europa del Este tengan mayor capacidad para ‘’atentar’’ contra entidades europeas.

Según la consultora de riesgos Howden, más del 70% de las empresas aún no cuentan con seguros cibernéticos; una falta de previsión que se refleja en los 204.000 millones de euros en pérdidas que podrían haberse evitado con medidas básicas de ciberseguridad en los países mencionados.

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